900 90 87 24
Las cubiertas de las construcciones representan una de las principales causas de los problemas de humedad. Son la parte de la estructura que más expuesta está a las inclemencias del tiempo, por lo que el mantenimiento de los tejados no es una actuación que deba o pueda postergarse.
Hay que realizar una serie de revisiones periódicas para garantizar que los materiales de aislamiento, los tornillos y los demás elementos usados en la techumbre aún mantienen sus propiedades intactas. En este artículo explicaremos cómo preservar el tejado en perfectas condiciones, pero, si ya has detectado los primeros indicios de presencia de agua, te recomendamos que escojas un servicio de reparación especializado como los tratamientos antihumedad de Sanysec. ¡Pídenos información y descubre todo lo que podemos hacer por tu vivienda!
Más vale prevenir que curar. El dicho, tan conocido, puede aplicarse a numerosas situaciones de la vida, incluidas las cubiertas.
Y es que la clave fundamental para mantener lejos de nuestro espacio las filtraciones por agua de lluvia es realizar un mantenimiento de tejados eficiente. Eso significa aplicar cuidados específicos a partes vitales de la estructura —como los pesebres y los canalones— y asegurarse de que los puntos críticos de la techumbre están limpios.
Realizar un mantenimiento periódico te evitará gastos mayores en el futuro
Con una serie de sencillos pasos, te ahorrarás el precio de arreglar humedades, así como posibles problemas con los/as vecinos/as a los que el agua pueda alcanzar. Recuerda que la presencia de goteras es un peligro para la salud de las personas, ya que favorece la proliferación de bacterias y hongos.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) establece la humedad como una de las señales del Síndrome del Edificio Enfermo (SEE), un término referido a las construcciones que producen dolencias por no reunir las condiciones adecuadas. Entre ellas, se encuentran patologías del nivel de la bronquitis o algunas reacciones alérgicas como las erupciones de la piel.
Del mismo modo que perjudica a tu organismo, la entrada de agua en las viviendas puede poner en grave riesgo toda su estructura. De las filtraciones se puede pasar con facilidad a tuberías rotas o a problemas en los cimientos. ¡Así que asegúrate de realizar un mantenimiento de tejados como corresponde!
Ya hemos visto la importancia del mantenimiento de los tejados, pero, ¿cómo se pueden detectar a tiempo sus problemas? El mejor modo es llevar a cabo controles minuciosos, especialmente de las zonas que suelen experimentar un mayor desgaste.
Empieza comprobando la integridad de la estructura desde fuera, ya sea desde la calle o —siempre que sea seguro— al nivel de la propia techumbre. Debes fijarte en que no haya agujeros, grietas ni musgo, ya que estas plantas dañan progresivamente las tejas.
Realiza una inspección externa e interna del tejado revisando tejas, canalones y puntos de unión
Seguidamente, revisa los canalones, las juntas y los enganches susceptibles de oxidación. Verifica que todos los elementos están bien ensamblados y trasládate al interior del edificio para realizar un examen interno.
Este se aplica desde el piso más elevado, el que está en contacto directo con las tejas. Debes ver si hay alguna mancha o textura diferente para saber si se filtra agua por la pared o por el techo; sobre todo, en las zonas que conectan con piezas de desagüe como los canalones.
Muchas veces, las filtraciones se producen por la acumulación de suciedad en los tejados. Un mantenimiento eficaz, por tanto, incluirá siempre acciones de limpieza para que el agua se elimine correctamente.
Sin embargo, sanear no basta para librarse de los problemas. También hay que sustituir los materiales aislantes de la humedad que se usan en la techumbre y las tejas que se hayan desprendido. ¡Veamos lo que hay que hacer cuando se identifica alguna clase de deterioro!
En los canalones y en los sumideros se termina concentrando un alto volumen de suciedad. Hablamos de hojas, ramitas o incluso pequeñas piedras que acaban en el tejado por acción del viento o de las aves.
Lo más común es que estos puntos se acaben atascando, evitando que el agua se desaloje y propiciando que se cuele por la pared. Hay instrumentos específicos para limpiarlos usando detergente y agua a presión, una acción que suele hacerse a finales de otoño. Aun así, te recomendamos que acudas a los/as profesionales para asegurar una limpieza profunda.
Los materiales de un tejado no son eternos. Antes o después hay que cambiarlos, y es mejor hacerlo de manera progresiva antes que sustituir todo el tejado.
El mantenimiento en este sentido supone reponer piezas que se hayan agrietado o caído. Las tejas, los solapes y la tornillería suelen ser los elementos más sensibles.
Además de cuidar las cubiertas, para sortear las filtraciones hay que invertir en materiales de impermeabilización con una vida útil larga. Por ejemplo, escogiendo una tela asfáltica gruesa o tejas de pizarra. Del mismo modo, recomendamos prestarle atención a la fachada de los edificios, donde un desperfecto podría acabar perjudicando al tejado.
El precio del mantenimiento de los tejados depende de su extensión y del tipo de acondicionamiento que precisen. Sin embargo, sea cual sea tu caso te aconsejamos que siempre pidas distintos presupuestos y aceptes las opciones intermedias que cuenten con un desglose de los costes.
Para que tengas una referencia, te adjuntamos a continuación algunas estimaciones de las reparaciones más habituales para superficies de 100 metros cuadrados:
El mantenimiento de tejados es esencial para preservar la integridad de un edificio y cuidar a quienes lo habitan. Por eso, lo mejor es confiar en profesionales que conozcan las técnicas de reparación y emplean materiales de calidad en sus actuaciones.
Si sospechas de problemas en tu techado, en Sanysec te ofrecemos un diagnóstico gratuito que determinará la solución más adecuada. Nuestras intervenciones cuentan con hasta 30 años de garantía en los que no tendrás que preocuparte de cómo sacar la humedad de tu casa. ¡Contacta con nosotros/as y asegura tu tranquilidad!
