La humedad en el techo suele ser un motivo de preocupación. Manchas negras, moho, condensación, da igual cual sea el problema, el resultado es que tu vivienda se ha vuelto mucho menos agradable y hasta provoca algo de rechazo el tener que convivir con este invitado no deseado.
En este artículo te vamos a contar todo lo que necesitas saber sobre la humedad en el techo, sus causas y sus consecuencias. También queremos ofrecerte las mejores soluciones a tus problemas con la humedad, que siempre va a pasar por encontrar a los mejores especialistas en el tratamiento antihumedad.
¿Quieres saber más? Te contamos todo lo que debes conocer para identificar este problema y acudir a quien mejor solución le va a dar. ¡Toma nota!
Son muchos los factores que determinan la aparición de la humedad en el techo, como, por ejemplo, la condensación en el interior de la vivienda, las filtraciones de agua desde el exterior hacia el interior de la vivienda; o, por otro lado, humedades que se producen por accidentes como la rotura de tuberías.
No obstante, lo más frecuente en lo que se refiere a la humedad en la techumbre suelen ser fisuras o grietas que dejan pasar el agua que se acumula en los tejados debido a las lluvias y a un mal mantenimiento de los sistemas de evacuación de aguas de la vivienda.
Las humedades en el techo salen porque la condensación se produce por culpa de cambios bruscos en la diferencia de temperatura entre el interior y el exterior de la vivienda.
Además de las filtraciones, también, como decíamos, la humedad en el techo puede aparecer por condensación. Por ejemplo, cuando las temperaturas suben, si el techo presenta un aislamiento inadecuado, el calor puede acabar por filtrarse, cuando las temperaturas vuelven a bajar ese calor acumulado puede provocar condensación.
En una casa siempre existe una cierta cantidad de humedad, no obstante, cuando estos niveles son demasiado elevados es cuando podemos observar problemas en nuestro hogar.
Para mantener tu vivienda en un rango aceptable de humedad, los niveles deben estar entre 30-50% y no más del 60% para evitar problemas más serios como los que te vamos a describir a continuación.
Las principales consecuencias de la aparición de humedad en el techado, en lo que se refiere a la vivienda y su estructura, son:
A veces, tus actividades diarias, como tender la ropa o ducharte con agua caliente agregan más humedad al aire de la que tu hogar puede soportar (normalmente por deficiencias de construcción), lo que lleva a una acumulación de humedad.
Estas son solo algunas de ellas, además, la humedad en el techo, igual que otro tipo de humedades, puede afectar a tu salud y a la de los tuyos:
La humedad en la vivienda también favorece el crecimiento de microorganismos como el moho y los ácaros del polvo.
Las humedades son un problema frecuente, pero no siempre son del mismo tipo. En Sanysec te explicamos las diferencias para que puedas identificarlas:
Ahora que entiendes los diferentes tipos de humedades, vamos a ver algunos consejos para evitarlas. ¡Seguimos!
Te damos algunos consejos que pueden ayudar a que puedas prevenir que aparezca la humedad en casa. Ten en cuenta que esto solo es orientativo, si el problema ya se ha asentado en tu vivienda, hay que recurrir a otro tipo de soluciones.
La mejor solución para poner fin a los problemas que puedas tener con la humedad en el techo es contratar servicios profesionales. Contar con la ayuda de profesionales en tratamientos antihumedad es lo que va a marcar la diferencia.
Puedes intentar prevenir y mitigar los problemas con la humedad en el techo, pero, al final, es imprescindible que, para obtener una solución definitiva, acudas a profesionales.
Ahora ya sabes qué es y cuáles son las consecuencias de la humedad en el techo. A nadie le gusta tener que lidiar con este problema, pero si ya se ha asentado en tu hogar, lo mejor es que acudas a profesionales en el diagnóstico y tratamiento de las humedades.
En Sanysec contamos con una amplia experiencia en ofrecer soluciones duraderas a los problemas con las humedades. ¡No esperes más! Solicita tu diagnóstico ahora y ¡acaba con las humedades!