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Como ya te hemos comentado en otras ocasiones, una de las muchas consecuencias que tiene la humedad (y una de las más desagradables) es la presencia de visitantes no deseados.
Hablamos de las bacterias de la humedad; seres de diversa tipología y precedencia que harán de tu hogar, negocio o local un lugar muy poco higiénico y acogedor. En este artículo vamos a agrupar estas bacterias en los dos principales tipos y a darte una serie de consejos para que puedas deshacerte de ellas sin problema. ¡Presta atención!
Las bacterias son microorganismos unicelulares minúsculos, no perceptibles para el ojo humano, presentes prácticamente en todos los lugares de la tierra. En sí mismos no son negativos; todo lo contrario. Sin las bacterias sería imposible la descomposición y el reciclaje de los elementos.
Pero existe un grupo de estos seres microscópicos que, en abundancia, pueden suponer todo un peligro para el organismo humano en determinadas circunstancias.
Cuando una persona descuida el estado de conservación de un lugar, sea este su vivienda, el establecimiento comercial en el que trabaja, una oficina o el trastero en el que almacena sus pertenencias; la humedad acumulada puede ir repercutiendo negativamente en el ambiente.
Para poder mantener nuestro hogar libre de gérmenes y bacterias es muy importante mantener los niveles de humedad entre el 30% y 50%, como recomienda la Agencia de Protección Ambiental de los Estados Unidos (EPA).
Así, cuando una estancia es sometida a una humedad superior al 50% o 60%, las bacterias se verán atraídas por este hábitat. La principal consecuencia del aumento de la presencia de estas bacterias de la humedad es la aparición y/o empeoramiento de enfermedades, sobre todo respiratorias.
Como indica la Organización Mundial de la Salud (OMS), las posibilidades de sufrir una enfermedad asmática aumentan en un 50% si el lugar en el que se vive sufre de un exceso de humedad.
En estos casos, las bacterias se acumulan en las zonas más afectadas por la humedad, pero también pululan por el aire y acaban adhiriéndose a objetos como toallas, almohadas, prendas de ropa, cubiertos, cepillos de dientes…
De esta manera pueden acabar alcanzando a todo aquel que se encuentre en el lugar. Tanto los más pequeños como los mayores de la casa deben tener especial cuidado con las bacterias de la humedad. Su organismo (en un caso por poco desarrollado y en el otro por demasiado débil) está mucho menos preparado para defenderse de estos organismos y son más sensibles a sus efectos en la salud.
Ahora que tienes un poco más de información acerca de las molestas y peligrosas bacterias atraídas por la humedad, llega el momento de que evalúes tu situación.
Si percibes o sospechas que alguna parte de tu hogar o de tu negocio puede estar siendo sometida a más humedad de la que debería, no lo dudes y acude a un profesional. Ataja el problema con tiempo suficiente y evita mayores daños que, con el tiempo, te costará mucho más reparar.
En Sanysec tenemos a un equipo de expertos antihumedad que localizarán el origen del problema y lo solucionarán de una vez y para siempre.
Contacta con nosotros llamando al número de teléfono y te haremos un diagnóstico completamente gratuito. ¿A qué estás esperando? ¡Actúa y protege tu vivienda y a los tuyos!
