Una de las formas de prevenir la humedad es un buen aislamiento de la vivienda, algo que, en muchas ocasiones, no se da. Esto acaba provocando un problema en tu hogar, ya que la humedad es un okupa difícil de echar. Por eso, es importante que sepas como aislar paredes interiores. Nunca es tarde para adaptar y prevenir que aparezcan problemas mayores, pero, eso sí, antes de hacerlo, lo mejor es contar siempre con la opinión de los profesionales.
En este sentido, antes de entrar en obras para mejorar el aislamiento en las paredes de tu vivienda, si notas que hay un problema de humedad, lo mejor es contactar con profesionales que puedan hacer un diagnóstico adecuado y te aporten las soluciones apropiadas, que no tienen por qué ser aislar paredes interiores. De todas formas, es interesante que conozcas todo el proceso, así que, ¡empezamos!
Hemos hablado de humedad y entiendes como se relaciona este problema con la necesidad de aislar paredes interiores. Pero además de para ayudarte a prevenir a este indeseado inquilino, este tipo de tratamientos en nuestro hogar también es útil por otras razones. En primer lugar, porque contribuye significativamente a mejorar la eficiencia energética de tu casa ya que ayuda a mantener una temperatura estable durante todo el año, evitando pérdidas en invierno y incrementos en verano.
Aislar las paredes interiores de una vivienda hace que mejore el bienestar y la comodidad de sus habitantes.
Sin embargo, esto no es lo único por lo que aislar paredes interiores es importantes, sino que también sirve para mejorar el confort térmico y acústico de los habitantes, creando ambientes mucho más tranquilos y agradables en los que estar. Por otra parte, un buen aislamiento ayuda a mantener una calidad de aire óptima en el interior de la vivienda y evita la aparición de moho y la proliferación de agentes alérgenos.
Antes de tomar una decisión sobre si hay que aislar o no la vivienda, es necesario que evalúes la necesidad real de hacerlo. Uno de los motivos ya lo hemos mencionado: la aparición de humedades. Esto es un indicador de que puede ser un tratamiento adecuado para ayudar a eliminarlas y prevenir que puedan volver a aparecer en el futuro. Otros aspectos que pueden influir en esta decisión son:
Cuando se tomó una decisión, aconsejada por profesionales, es el momento de que decidan qué tipo de material va mejor o solucionará mejor el origen del problema en el aislamiento de la vivienda. Teniendo esto en cuenta, estas son algunas de las opciones más comunes:
Económica y fácil de instalar, es un buen aislante térmico gracias a la relación entre su superficie y su peso. Atrapa el aire entre los filamentos haciendo que tenga esa capacidad aislante. Además de esto, la fibra de vidrio también es incombustible, por lo que es una protección optima contra el fuego y, al mismo tiempo, es hidrofuga, por lo que repele el agua.
Por otra parte, este tipo de material permite el paso de vapor de agua y es duradero, lo que lo convierte en una solución bastante adoptada en muchos tratamientos aislantes antihumedad.
La lana mineral es un material que se compone de filamentos inorgánicos que se entrelazan para formar una especie de malla o tejido. Con este tipo de composición se consigue un buen material aislante que, además, aporta resistencia contra el fuego ya que es incombustible.
Este tipo de material aislante se crea fundiendo arena y, ahora mismo, es uno de los materiales que más se emplean en la rehabilitación de fachadas, con el aislamiento por el interior de las mismas.
En este caso estamos ante un material plástico espumado, rígido y que se fabrica a partir de gránulos de poliestireno o alguno de sus copolímeros. Es un material sencillo de moldear y que, por tanto, es versátil.
Se usa para aislar paredes interiores ya que tiene una gran resistencia térmica y conductividad. Además, igual que sucede con otros de la lista, es un sistema ligero, resistente al agua y a los golpes. También se usa mucho porque es sencillo de instalar y manipular.
El proceso de manipulación e instalación de cualquiera de los materiales mencionados requiere de profesionales cualificados para hacerlo. Estos son los pasos que se suelen seguir a la hora de hacer la instalación de aislantes en paredes interiores:
Cuando se ha aislamiento de paredes, todo es fundamental para que no vuelvan a aparecer problemas. Con un buen mantenimiento podrás conseguir garantizar la eficacia del tratamiento a largo plazo. Para ello, ten en cuenta los siguientes puntos:
Si sigues todos estos pasos, será mucho más sencillo hacer que el aislar paredes interiores tenga los resultados a largo plazo que necesitas. Eso sí, ten en cuenta que todo el proceso es necesario que sea supervisado y ejecutado por profesionales. Así te puedes asegurar que los materiales y tratamientos aplicados son de calidad y están garantizados a largo plazo.
Como ves, la humedad es un enemigo complicado de abatir. Para lograrlo, lo mejor suele ser contar con la ayuda de expertos en el tratamiento del problema. Profesionales que identifiquen adecuadamente el origen del problema y que aporten soluciones que sean duraderas y estén garantizadas. Por surte, has llegado al lugar indicado. En Sanysec te ofrecemos un servicio de diagnóstico gratuito para encontrar el problema y decidir, contigo, cuál es la mejor solución.
No tiene por qué ser un aislamiento térmico en paredes interiores, pero sea cual sea la solución a tu problema, nuestros tratamientos están garantizados a largo plazo. ¿Necesitas saber más? No te quedes con dudas sobre nuestros servicios, ¡haz que tu casa vuelva a ser ese lugar feliz y cómodo que era antes de que la humedad lo invadiera! ¡Contacta ahora y acaba con la humedad en tu hogar!