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Tener una buena calidad de sueño es vital para nuestra salud física y mental, y para que nuestro cuerpo regenere la energía que ha ido gastando a lo largo del día. Y, aunque no lo parezca, la presencia de humedad en casa afecta directamente en este aspecto.
Por eso, en el artículo de hoy queremos preguntarnos si es malo dormir con humedades y cómo estás repercuten en la manera en que descansamos por las noches. Los profesionales antihumedades lo tienen claro. ¡Sigue leyendo y descubre todo al respecto!
Nosotros y la comunidad científica lo tenemos claro: Sí. Dormir con humedades es malo para el desarrollo del ciclo de sueño y, por lo tanto, para tu descanso y para tu salud en general.
Pero, ¿por qué? El sueño se ve afectado por multitud de factores, como la temperatura, el ruido, la comodidad… Unos altos niveles de humedad aumentan la sensación térmica en el dormitorio, por lo que inevitablemente sudarás más.
Al sudar, nuestro cuerpo aumenta todavía más la temperatura (es un ciclo) y, lo que es aún peor, al encontrarnos en un lugar húmedo, el sudor no se seca. Esta sudoración continua a lo largo de toda la noche puede llegar a provocar deshidratación.
La humedad influye en los ciclos de sueño
Para saber cómo la humedad afecta al sueño, antes tenemos que explicar en qué consisten los diferentes ciclos en los que se compone nuestro descanso cuando dormimos.
Estas son un total de cinco fases que se van repitiendo en ciclos continuos a lo largo de toda la noche (los expertos recomiendan dormir al menos 8 horas):
Las humedades tienen efectos negativos en nuestro descanso
Pues bien; cuando te encuentras durmiendo en una habitación con altos niveles de humedad, esta puede afectar directamente a esa profundidad del sueño de la que te hemos hablado, reduciendo la cantidad de tiempo que pasas tanto en la tercera como en la cuarta fase del sueño; las más importantes.
La humedad es la cantidad de vapor de agua que está presente en el aire, es decir, estamos hablando de la cantidad de agua que puedes encontrar en el ambiente de tu habitación. Diferentes factores pueden causar la aparición de humedades: condensación, capilaridad y filtración son los casos más frecuentes.
Dormir con humedad en la habitación afecta no solo al sueño, sino también al cuerpo humano: es el origen de enfermedades, dolencias y problemas de salud. También es un problema que la humedad sea demasiado baja, ya que puede afectar a mucosas y a las gargantas de las personas.
Por aumento del nivel de humedad relativa o por descenso del mismo, puedes acabar por tener problemas derivados de la humedad en tu casa.
Existen diferentes niveles, pero en este caso nos centramos en la humedad relativa del aire. Esta se cifra en la relación entre:
La humedad relativa ideal para dormir no existe, es un debate recurrente. Sin embargo, se recomienda una humedad de entre 30-50% en tu habitación. En ningún caso, puedes superar el 60% de humedad relativa en tu dormitorio.
Dormir con humedad en la habitación afecta no solo a las personas, sino también a plantas, animales y objetos que hay en ella. También es un problema que la humedad sea demasiado baja, ya que puede afectar a mucosas y a las gargantas de las personas. Por aumento del nivel de humedad relativa o por descenso del mismo, puedes acabar por tener problemas derivados de la humedad en tu casa.
Las soluciones pueden variar en función del tipo de humedades. Por esta razón es importante detectar el origen de las humedades, es decir, atajar el problema de raíz.
Algunas de las medidas más recurrentes son:
Te recomendamos cerrar la puerta de la habitación mientras usas el deshumidificador, pero puedes dejarla abierta mientras ventilas para hacer corriente.
Los efectos que esto tiene sobre tu cuerpo son muchos. Te sentirás enormemente cansado a lo largo del día; te resultará difícil acordarte de asuntos sencillos o recientes, pues tu cerebro estará trabajando “a medio gas”; e incluso puede provocar la disminución de la fertilidad si esta situación se prolonga en el tiempo.
Además, estudios científicos han demostrado cómo la falta de descanso de manera continuada provocada por exceso de humedad está estrechamente relacionada con la hipertensión, con la obesidad, la diabetes, enfermedades mentales como la depresión o la ansiedad, o el debilitamiento del sistema inmunitario.
Otra de las consecuencias de no resolver los problemas de humedad en casa es el efecto que esta tiene en nuestra salud pulmonar. Los achaques respiratorios se agravan a causa de este exceso de humedad y del moho que provoca en paredes y techos.
Así que, si tienes asma, bronquitis, rinitis o cualquier otra enfermedad respiratoria, dormir con altos niveles de humedad hará que los síntomas estén cada vez más presentes y tu salud se verá resentida.
Además, los malos olores producto del exceso de vapor de agua en el ambiente no solo son desagradables cuando estás despierto, sino que al dormir con esta molestia también podrían acabar provocando dolor de cabeza e incluso problemas de estómago.
Ya tienes toda la información relevante acerca de lo malo que es dormir con humedades. Ahora te toca actuar para poner fin de una vez por todas a esta situación y contribuir, a fin de cuentas, a un descanso prolongado y de calidad, tanto para ti como para tus seres queridos.
Contacta con Sanysec y uno de nuestros especialistas antihumedades se desplazará a tu casa para hacerte un diagnóstico gratuito y resolver aquellos problemas de humedad que; tanto por filtración, capilaridad o condensación; está afectando a la habitabilidad y confort de tu hogar. ¡No esperes más y acaba definitivamente con esas humedades!
